Los nervios del primer día

La verdad es que nunca se me paso por la cabeza que ese día llegaría, y así fue, contando los días, contando las horas, contando los minutos y cada vez que se acercaba mas el dia del viaje, mas tranquilo estaba, si, aunque parezca mentira en mi había un halo de tranquilidad.

Todos los nervios habían desaparecido, los nervios los tuve los meses anteriores, cuando reserve el billete de avión y cuando pague el viaje, porque lo veía todo muy cercano, pero aun quedaban dos meses de sufrimiento, pero cuando tan solo quedaban dos días para el viaje, realmente estaba muy tranquilo, relajado, porque hasta que no me viera montado en el avión dirección a frankfurt no creería que mi sueño se haría realidad por fin en mi vida.


El sueño comenzo un 28 de abril, recién entrada la noche llegue al aeropuerto de Barajas, ahí empecé a conocer a gente que serian mis compañeros de viaje, nos reunimos todos en una cafetería de Barajas y pasamos practicamente toda la noche hablando, se veía que era buena gente y que podría sacar buenos amigos la verdad es que también sabia que cuando acabara el viaje cada uno volvería a su destino de origen y no sabíamos si nos volveríamos a ver, creo que algún día podrá ser, que por lo menos todos nos juntaremos aunque siempre nos faltara una persona, Raúl (razieldios), pero cuando vuelva a España seguro que nos juntaremos, el caso es.... que creo que dudo que vuelva a España....

Aeropuerto de Frankfurt

Jesus, toni, joluex y david en el aeropuerto

Siguiendo con el viaje, cogimos un vuelo una parte del grupo hacia frankfurt y el resto de la gente se espero a otro vuelo con otra compañía aérea, mi grupo salio a las 06.10 de la mañana y llegamos a frankfurt a las 09.00 de la mañana donde ahí esperaríamos a los del otro grupo y cogeríamos todos un vuelo en dirección a tokyo, nos esperaban nada mas y nada menos que 11 horas de vuelo, la verdad es que es muy pesado estar tantas horas en una avión, un poco estrecho por coger billetes baratos, pero al final la ilusión pudo con nuestros dolores de espalda y riesgos de contraer el famoso síndrome de la clase turista, nos levantabamos para mover las piernas y hacer una visita al baño.

Pronto llegaría el destino, y a eso de las 07.30 de la mañana del día 29 estábamos en el aeropuerto de Narita, en tokyo, desde allí nos esperaba coger un tren que nos llevaría al centro de tokyo, pero deberíamos pasar una hora y media en el tren hasta llegar al destino.

Y eso sera en otro capitulo.....